Harris nació en Bray, Irlanda, en 1930, y comenzó su carrera como actor en los años 50. A lo largo de su carrera, Harris actuó en más de 70 películas, consiguiendo importantes interpretaciones en algunas de las más importantes de la época.
Uno de sus primeros y más importantes trabajos fue la película This Sporting Life (1963), una obra de arte dirigida por Lindsay Anderson que se centra en la vida de un jugador de rugby de clase obrera. La actuación de Harris como el jugador en cuestión le valió una nominación al Oscar a mejor actor, convirtiéndose así en uno de los más destacados de su carrera.
En 1967, Harris protagonizó la icónica película de Westerns The Appaloosa, donde compartió pantalla con Marlon Brando. La película de espagueti western cuenta con uno de los actores más icónicos de la historia del cine, interpretando a un cowboy estadounidense que se ve envuelto en problemas con los bandidos locales.
Pero sin duda, la película que mejor representó a Richard Harris fue la súper producción Camelot (1967), donde interpretaba a Rey Arturo de legendarias hazañas y hazañas. La película se convirtió en un hito del cine musical y un éxito de taquilla en su época.
En 1970, Harris protagonizó el irreverente western Little Big Man, una película que refleja un momento en la historia donde el ejército estadounidense está desarrollando una guerra genocida contra los nativos americanos. La historia está contada desde la perspectiva de un hombre mayor que recuerda su vida y la influencia de los nativos en ella. La actuación de Harris como el influyente Wild Bill Hickok fue criticada en un primer momento, pero con el paso del tiempo su valor en la película fue reconocido.
Aunque no siempre tuvo éxito en cada película, esto no significó la pérdida del carisma y talento de Harris. En 1972 apareció en The Molly Maguires, un drama histórico que describe los esfuerzos de un grupo de mineros irlandeses por oponerse a las políticas opresivas de los propietarios de las minas. Este papel le mostró una vez más como un actor capaz de llevar a cabo un papel con profundidad.
En la década de los 80, Harris obtuvo su segundo y último papel nominado al Oscar en la película Unforgiven de 1992, representando al despiadado pistolero inglés “English Bob”. También participó como el director Albus Dumbledore en la primera y segunda entrega de las películas de Harry Potter, un personaje que, aunque interpretó en un par de ocasiones, se convirtió en un elemento importante.
Richard Harris dejó este mundo en 2002, dejando un legado útil en la industria del cine, con un talento indudable y una carrera magnífica. Aunque Harris ya no está con nosotros, su gran huella en el cine y su talento seguirán siendo recordados por muchos años.