1. Mantén el jardín limpio y ordenado
Las cigarras se sienten atraídas por los árboles con ramas muertas y debilitadas, así como por aquellos que presentan acumulación de hojas caídas. La primera medida que puedes tomar consiste en mantener tu jardín limpio y ordenado. Retira las ramas muertas y poda regularmente los árboles para fortalecer su estructura. Asimismo, recoge las hojas caídas con frecuencia para evitar que se conviertan en un imán para las cigarras.
2. Utiliza barreras físicas
Existen diferentes barreras físicas que pueden ayudarte a proteger tus árboles del ataque de las cigarras. Puedes envolver la base de los troncos con un material como la malla de pollo o el papel de aluminio, que dificultará el anidamiento de las cigarras. Además, puedes utilizar bolsas de tela alrededor de las ramas más bajas para evitar que las cigarras las invadan.
3. Aplica repelentes naturales
Algunas sustancias naturales pueden resultar repelentes para las cigarras. Por ejemplo, el aceite de neem, el jabón insecticida a base de piretrinas o el aceite esencial de menta pueden ayudarte a mantener alejadas a estas molestas criaturas. Prepara una solución diluida de alguno de estos productos y aplícala sobre los árboles de tu jardín con regularidad.
4. Crea hábitats atractivos para los depredadores de cigarras
Existen varios animales que se alimentan de cigarras y pueden ayudarte a controlar su población de forma natural. Atrae pájaros como tordos, mirlos o estorninos a tu jardín colocando comederos o construyendo nidos artificiales. También puedes fomentar la presencia de murciélagos instalando cajas nido adecuadas. Estos depredadores ayudarán a reducir la población de cigarras de manera efectiva.
5. Consulta a un especialista
Si las cigarras siguen siendo un problema persistente en tu jardín, lo mejor es consultar a un especialista en control de plagas. Un profesional podrá evaluar la situación y recomendarte el tratamiento más adecuado para erradicar o controlar la presencia de las cigarras en tus árboles.
- Mantén tu jardín limpio y ordenado.
- Utiliza barreras físicas como mallas de pollo o papel de aluminio.
- Aplica repelentes naturales como aceite de neem, jabón insecticida a base de piretrinas o aceite esencial de menta.
- Crea hábitats atractivos para los depredadores de cigarras, como pájaros y murciélagos.
- Consulta a un especialista en control de plagas si el problema persiste.